En los últimos años, ha habido un aumento en la popularidad de las viviendas compartidas para personas mayores. Esta tendencia no solo se debe a motivos económicos, sino también a razones sociales y emocionales.
Compartir casa en la vejez puede ofrecer una variedad de beneficios, como la compañía y el apoyo emocional, la reducción del aislamiento social y la posibilidad de compartir los gastos de la vivienda. En este artículo, exploraremos por qué las viviendas compartidas son una opción cada vez más popular para las personas mayores, y cómo pueden mejorar su calidad de vida.
Ventajas de las viviendas compartidas para personas mayores
Las viviendas compartidas para personas mayores, son una opción de alojamiento cada vez más popular. A medida que envejecemos, es común que las personas deseen vivir en un ambiente seguro, cómodo y con una comunidad de apoyo que comparta sus intereses y preocupaciones. Las viviendas compartidas para personas mayores, pueden ofrecer exactamente eso.
En esencia, una vivienda compartida es una situación de convivencia en la que varias personas mayores, comparten un espacio de vivienda y, a menudo, gastos asociados. Dentro de estos gastos encontramos facturas de servicios públicos, reparaciones y mantenimiento.
Esto permite que los residentes puedan vivir en una casa más grande y espaciosa, sin tener que asumir la carga financiera completa de una vivienda para una sola persona.
Además de reducir los gastos, las viviendas compartidas para personas mayores pueden proporcionar una mayor seguridad y apoyo social que vivir solos. Los residentes pueden compartir responsabilidades y tareas domésticas, como la limpieza, la cocina y la compra de alimentos, lo que puede hacer que el día a día sea más fácil y menos estresante.
También pueden compartir intereses y actividades, como juegos de mesa, salidas culturales, caminatas y excursiones, lo que puede fomentar la camaradería y ayudar a prevenir el aislamiento social.
¿Por qué elegir una vivienda compartida para personas mayores?
La vejez es una etapa de la vida en la que muchas personas pueden sentirse solas y aisladas, especialmente cuando se trata de vivir en un hogar propio. Las viviendas compartidas para personas mayores, son una opción cada vez más popular para aquellos que buscan compañía y una forma más económica de vivir.
A medida que las personas envejecen, sus necesidades y deseos pueden cambiar. Por ejemplo, pueden requerir más ayuda en tareas diarias, como cocinar, limpiar o incluso cuidados médicos. En lugar de pagar por servicios a tiempo completo, compartir una casa con otros adultos mayores puede proporcionar una solución más económica y eficiente.
Otra ventaja importante de las viviendas compartidas es la oportunidad de construir amistades y relaciones cercanas con personas que comparten intereses similares. Los residentes pueden socializar en actividades en grupo, como juegos, excursiones o incluso clases educativas.
La interacción social regular puede mejorar la calidad de vida y reducir la soledad y el aislamiento que a menudo se experimentan en la tercera edad.
Además, las viviendas compartidas para personas mayores suelen ser más accesibles que las viviendas tradicionales, con características específicas para la seguridad y la accesibilidad, como pasamanos en las escaleras y duchas adaptadas.
Consejos para encontrar compañeros de vivienda en la tercera edad
Envejecer puede ser una experiencia solitaria, pero cada vez más personas mayores están optando por estar juntas en viviendas compartidas. Compartir un hogar no solo ayuda a reducir los costos de vivienda, sino que también puede proporcionar una sensación de compañía y seguridad.
Si estás considerando esta opción, aquí hay algunos consejos para encontrar compañeros de vivienda en la tercera edad.
Comunica tus necesidades
Es importante que sepas qué tipo de compañero de viviendas compartidas para personas mayores estás buscando. ¿Necesitas a alguien que pueda ayudarte con las tareas domésticas? ¿Prefieres alguien con tus mismos intereses? Al comunicar tus necesidades, podrás encontrar a alguien que complemente tus habilidades y preferencias.
Busca en línea
Existen sitios web especializados en conectar a personas mayores que buscan compañeros de viviendas compartidas para personas mayores. Algunos de ellos son Senior Homeshares, Golden Girls Network y Silvernest. Estos sitios te permiten filtrar por ubicación, preferencias y necesidades, lo que hace más fácil encontrar un compañero adecuado.
Pide referencias
No dudes en pedir referencias a cualquier persona con la que estés considerando vivir. Es importante asegurarte de que tienes una buena conexión con el posible compañero de vivienda, pero también necesitas estar seguro de que es alguien confiable y seguro.
Conoce a tus posibles compañeros
Programa una reunión en persona antes de tomar cualquier decisión. Esto te permitirá conocer a la persona, hacer preguntas y establecer expectativas claras.
Habla con amigos y familiares
Compartir tus planes con amigos y familiares puede ser útil. Ellos pueden tener contactos o conocidos que estén interesados en una de las viviendas compartidas para personas mayores, o pueden ayudarte a difundir la palabra a través de las redes sociales.
Asesórate legalmente
Antes de firmar cualquier acuerdo, es importante asesorarse legalmente para proteger tus intereses y derechos.