Una nevera portátil eléctrica es un dispositivo que permite conservar alimentos y bebidas a una temperatura adecuada, sin necesidad de usar hielo o acumuladores de frío. Se conecta a una fuente de alimentación eléctrica, ya sea de 12 V (como el mechero del coche) o de 230 V (como un enchufe doméstico), y utiliza un sistema de refrigeración termoeléctrico o por compresor para generar frío.
Una nevera portátil eléctrica es muy útil para llevar en el coche, en el camping, en la playa o en cualquier otro lugar donde no haya una nevera convencional. Permite mantener los alimentos frescos y seguros, evitando el riesgo de intoxicaciones alimentarias por el calor. También permite disfrutar de bebidas frías en cualquier momento y lugar, lo que resulta muy agradable en los días calurosos.
Tipos de neveras portátiles eléctricas
Existen dos tipos principales de neveras portátiles eléctricas, según el sistema de refrigeración que utilizan: las termoeléctricas y las de compresor.
Las neveras portátiles eléctricas termoeléctricas funcionan mediante el efecto Peltier, que consiste en la transferencia de calor entre dos placas metálicas al aplicar una corriente eléctrica. Una placa se enfría y la otra se calienta, creando una diferencia de temperatura que se transmite al interior de la nevera.
Estas neveras suelen tener una capacidad de refrigeración limitada, que depende de la temperatura ambiente. Normalmente pueden enfriar entre 15 y 20 °C por debajo de la temperatura exterior, pero no pueden congelar. Tienen la ventaja de ser más ligeras, silenciosas y económicas que las de compresor.
Las neveras portátiles eléctricas de compresor funcionan mediante un circuito cerrado de gas refrigerante, que se comprime y se expande alternativamente para absorber y liberar calor. El gas pasa por un evaporador, donde se enfría y se convierte en líquido, y luego por un condensador, donde se calienta y se vuelve a convertir en gas.
El intercambio de calor entre el gas y el interior de la nevera produce el efecto de enfriamiento. Estas neveras tienen una capacidad de refrigeración mucho mayor que las termoeléctricas, ya que pueden alcanzar temperaturas negativas y congelar los alimentos. Tienen la ventaja de ser más potentes, eficientes y regulables que las termoeléctricas, pero también son más pesadas, ruidosas y caras.
Cómo elegir una nevera portátil eléctrica
A la hora de elegir una nevera portátil eléctrica, hay que tener en cuenta varios factores, como la capacidad, el consumo energético, el diseño y el precio de este producto.
La capacidad es el volumen interior que tiene la nevera para almacenar alimentos y bebidas. Se mide en litros y suele variar entre 10 y 50 litros. La capacidad adecuada dependerá del número de personas que vayan a usar la nevera y del tiempo que vayan a estar fuera de casa. Hay que tener en cuenta que cuanto mayor sea la capacidad, mayor será también el peso y el tamaño de la nevera.
El consumo energético es la cantidad de electricidad que necesita la nevera para funcionar. Se mide en vatios (W) o en amperios (A). El consumo energético dependerá del tipo de refrigeración, del nivel de temperatura y del tiempo de uso.
Hay que tener en cuenta que cuanto mayor sea el consumo energético, mayor será también el gasto en combustible o en batería del coche. Por eso es importante elegir una nevera con una buena eficiencia energética (clase A++ o A+) y con un modo ecológico que reduzca el consumo cuando la nevera no necesite trabajar a máxima potencia.
El diseño es la forma y el aspecto que tiene la nevera. Hay neveras de diferentes formas (rectangulares, cilíndricas, cuadradas) y colores (gris, azul, rojo, verde). El diseño influye en la estética y en la practicidad de la nevera. Hay que tener en cuenta que cuanto más compacta y ligera sea la nevera, más fácil será de transportar y de guardar.
También hay que fijarse en otros detalles, como el tipo de asa, el sistema de apertura, el número y el tamaño de los compartimentos, la presencia o no de ruedas y la posibilidad de usarla tanto en frío como en calor.
El precio es la cantidad de dinero que cuesta la nevera portátil eléctrica. Su precio dependerá del tipo de refrigeración, de la capacidad, del consumo energético y del diseño. Precio suele variar entre 50 y 300 euros. Hay que tener en cuenta que cuanto más cara sea la nevera, más calidad y prestaciones tendrá, pero también más inversión inicial requerirá. Por eso es importante comparar diferentes opciones y elegir la que mejor se adapte a nuestro presupuesto y a nuestras necesidades.
Un plus muy interesante de a nevera portátil eléctrica
Una nevera portátil eléctrica es un dispositivo muy útil para conservar alimentos y bebidas a una temperatura adecuada cuando estamos fuera de casa. Existen dos tipos principales de neveras portátiles eléctricas: las termoeléctricas y las de compresor. Cada una tiene sus ventajas e inconvenientes, por lo que hay que elegir la que mejor se adapte a nuestras necesidades.
A la hora de elegir una nevera portátil eléctrica, hay que tener en cuenta varios factores, como la capacidad, el consumo energético, el diseño y el precio. Esperamos que este artículo te haya ayudado a conocer mejor las características y los beneficios de las neveras portátiles eléctricas.