¿Te gustaría tener una conexión WiFi de calidad en tu jardín, terraza o balcón? ¿Quieres ampliar la cobertura de tu red inalámbrica a zonas alejadas de tu router? ¿O tal vez necesitas captar una señal WiFi pública o de un vecino desde tu casa? Si has respondido que sí a alguna de estas preguntas, entonces lo que necesitas es una antena WiFi exterior.
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¿Qué es una antena WiFi exterior?
Una antena WiFi exterior es un dispositivo que se coloca en el exterior de un edificio o una vivienda y que tiene la función de emitir o recibir señales WiFi. Puede actuar como emisora, receptora o ambas cosas a la vez, dependiendo del tipo y del modo de funcionamiento que tenga.
Una antena WiFi exterior se conecta a un router, a un punto de acceso, a un repetidor o a un adaptador WiFi mediante un cable coaxial o un cable de red. El cable debe ser lo más corto posible y tener la menor pérdida de señal posible, ya que esto afecta al rendimiento de la antena.
Una antena WiFi exterior suele tener una mayor ganancia y una mayor potencia que una antena WiFi interior, lo que le permite alcanzar distancias más largas y superar obstáculos como paredes, árboles o edificios. Además, una antena WiFi exterior suele estar diseñada para resistir las condiciones climáticas adversas, como la lluvia, el viento o el sol.
¿Para qué sirve una antena WiFi exterior?
Una antena WiFi exterior sirve para mejorar la calidad y el alcance de la conexión WiFi en zonas donde la señal es débil o inexistente. Con una antena WiFi exterior puedes conseguir los siguientes beneficios:
- Ampliar la cobertura de tu red WiFi doméstica a zonas exteriores como el jardín, la terraza o el balcón.
- Captar una señal WiFi pública o de un vecino desde tu casa, siempre que tengas su permiso y su contraseña.
- Crear una red WiFi propia en lugares donde no hay conexión a Internet por cable o por fibra óptica, como una casa rural, una caravana o un barco.
- Establecer una conexión inalámbrica entre dos puntos separados por una distancia considerable, como dos edificios o dos viviendas.
- Mejorar la velocidad y la estabilidad de tu conexión WiFi, reduciendo las interferencias y los cortes.
¿Qué tipos de antenas WiFi exteriores hay?
Existen diferentes tipos de antenas WiFi exteriores según su forma, su tamaño, su frecuencia, su polarización y su dirección. A continuación te explicamos las principales características de cada uno:
Según su forma
Las antenas WiFi exteriores pueden ser omnidireccionales o direccionales. Las antenas omnidireccionales emiten o reciben la señal en todas las direcciones por igual, mientras que las antenas direccionales se enfocan en una dirección concreta. En el caso de antenas omnidireccionales, son más fáciles de instalar y configurar, pero tienen menos alcance y más interferencias que las antenas direccionales. Las antenas direccionales son más difíciles de instalar y configurar, pero tienen más alcance y menos interferencias que las antenas omnidireccionales.
Según su tamaño
Varían en dimensiones, lo que significa que pueden ser pequeñas o grandes. Las antenas pequeñas son más discretas y portátiles, pero tienen menos ganancia y menos potencia que las antenas grandes. Las antenas grandes son más visibles y pesadas, pero tienen más ganancia y más potencia que las antenas pequeñas.
Según su frecuencia
Pueden ser de 2.4 GHz o de 5 GHz. Las antenas de 2.4 GHz son compatibles con la mayoría de los dispositivos WiFi, pero tienen más saturación y más interferencias que las antenas de 5 GHz. Las antenas de 5 GHz son compatibles con los dispositivos WiFi más modernos, pero tienen menos alcance y menos penetración que las antenas de 2.4 GHz.
Según su polarización
Las antenas WiFi exteriores pueden ser de polarización vertical, horizontal o circular. La polarización se refiere a la orientación de las ondas electromagnéticas que emite o recibe la antena. La polarización vertical es la más común y la más adecuada para las antenas omnidireccionales, mientras que la polarización horizontal o circular es más adecuada para las antenas direccionales.
Según su dirección
Algunas antenas WiFi exteriores pueden ser de tipo panel, parabólica, yagi o sectorial. Las antenas de tipo panel tienen forma rectangular y se orientan hacia la dirección deseada. Mientras que las antenas parabólicas tienen forma de plato y se orientan hacia la dirección deseada. Las antenas yagi tienen forma de vara con varios elementos y se orientan hacia la dirección deseada. Las antenas sectoriales tienen forma de abanico y se orientan hacia un ángulo determinado.
¿Cómo elegir la mejor antena WiFi exterior?
Para elegir la mejor antena WiFi exterior debes tener en cuenta los siguientes factores:
- El uso que le vas a dar: dependiendo de si quieres ampliar tu red WiFi doméstica, captar una señal WiFi externa, crear una red WiFi propia o establecer una conexión inalámbrica entre dos puntos, necesitarás un tipo u otro de antena WiFi exterior.
- La distancia que quieres cubrir: dependiendo de si quieres cubrir una distancia corta, media o larga, necesitarás una antena WiFi exterior con más o menos ganancia y más o menos potencia.
- El entorno donde la vas a instalar: dependiendo de si vas a instalar la antena WiFi exterior en un lugar con muchos o pocos obstáculos, con mucha o poca interferencia, con mucho o poco espacio, necesitarás una antena WiFi exterior con más o menos dirección y más o menos frecuencia.
- El presupuesto que tienes: dependiendo de cuánto dinero quieras gastar, podrás acceder a una antena WiFi exterior con más o menos calidad, más o menos funcionalidades y más o menos garantía.
¿Cómo instalar y configurar una antena WiFi exterior?
Para instalar y configurar una antena WiFi debes seguir los siguientes pasos:
- Elegir el lugar adecuado: debes elegir un lugar donde haya buena visibilidad entre la antena WiFi exterior y el punto al que quieres conectarte, donde haya poca interferencia y donde haya una toma de corriente cercana. También debes tener en cuenta el tipo de soporte que necesitas para fijar la antena WiFi exterior al mástil, al tejado, a la pared o al balcón.
- Conectar el cable: debes conectar el cable coaxial o el cable de red entre la antena WiFi exterior y el router, el punto de acceso, el repetidor o el adaptador WiFi. El cable debe ser lo más corto posible y tener la menor pérdida de señal posible. También debes proteger el cable de los agentes externos como el agua, el polvo o los roedores.
- Orientar la antena: debes orientar la antena WiFi exterior hacia la dirección donde está el punto al que quieres conectarte. Si la antena es omnidireccional, no hace falta que la orientes. Si la antena es direccional, debes ajustar el ángulo horizontal y vertical hasta conseguir la mejor señal posible. Puedes usar un medidor de señal o una aplicación móvil para ayudarte en esta tarea.
- Comprobar el funcionamiento: debes comprobar que la antena WiFi exterior funciona correctamente y que te ofrece la calidad y el alcance de conexión que esperabas. Puedes usar un ordenador, un móvil o una tableta para conectarte a tu red WiFi y hacer algunas pruebas de velocidad, latencia y estabilidad. Si no estás satisfecho con el resultado, puedes intentar cambiar la orientación de la antena, el canal de la red o el lugar de instalación.
Recuerda que una antena WiFi te permite mejorar la calidad y el alcance de tu conexión WiFi en zonas donde la señal es débil o inexistente. Solo tienes que seguir los pasos que te hemos explicado para instalarla y configurarla correctamente.
